En los últimos años estamos viviendo una transformación radical de la Educación Primaria, unos cambios profundos que están modificando la estructura organizativa de los centros y obligando al profesor/tutor a impartir los aprendizajes como si de un especialista se tratara, perdiendo el criterio de unidad, de clase, asociada a un tutor puesto que no dispone, sencillamente, de horas de docencia con su alumnado.
Si a esto añadimos recortes en las plantillas del profesorado, eliminado cupos como el de refuerzo y apoyo que es vital para algunos alumnos, o la supresión de un tutor de primaria por un especialista al incluir la asignatura de francés como segundo idioma extranjero, la situación se hace para los centros de primaria más que compleja y caótica.
Es lamentable observar como en la planificación de los centros solo se tienen en cuenta «las sillas», las unidades oficiales/visibles del colegio para hacer el cálculo de los puestos docentes a cubrir, sin valorar en absoluto otras variantes: horas de refuerzo y apoyo, horas de reducción por pertenecer a planes, proyectos o programas o por ser mayor de cincuenta y cinco años, horas de docencia «real» de especialistas, horas deducibles por equipos directivos… En todos estos casos estas «mordidas» del horario lectivo inciden directamente en el horario de la plantilla y obliga a formar unidades donde pueden entrar hasta siete «especialistas» diferentes… y si el centro es bilingüe la situación adquiere auténticos tonos de alarma. Estoy hablando de situaciones de «normalidad», puesto que en casos excepcionales, por ejemplo cuando hay bajas y estas no se pueden cubrir,simplemente porque no hay maestros, podemos hablar de alarma absoluta. Este curso en muchos tramos horarios no disponemos de nadie para cubrir una posible baja. ¿Que hacemos, juntamos cursos?
Creo que es más que evidente que el sistema de refuerzos y apoyos ha desaparecido, es decir, el concepto de educación primaria unido al de inclusividad es una reliquia del pasado.
A los que no estáis «metidos» en el mundo educativo os podemos decir que los centros de primaria se están convirtiendo en modelos de gestión tipo institutos, tomando sus formas en cuanto a la planificación docente. Antes un profesor/tutor de primaria daba en «su» clase las asignaturas troncales: lengua, matemáticas, naturales, sociales. Ahora se hace imposible, sobretodo porque el recorte de las plantillas y la incorporación de este modelo nos obliga a diversificar el número de maestros que entran en un aula,.
A modo de ejemplo: en un curso de primero de primaria bilingüe (niños de 6 años) donde el tutor no sea bilingüe, este profesor tutor en muchos casos solo podrá darle lengua y matemáticas, o lo que me parece aún mayor aberración: que la tutoría le sea adjudicada sin más remedio a un especialista de música, de inglés o de francés… !porque no hay maestros de primaria!
¿Podemos hablar de aprendizaje cooperativo, de metodologías inclusivas, de proyectos integrados, de comunidades de aprendizaje si me apuráis, con esta segmentación y diversificación del profesorado dentro del aula?
Pensad solo un poco , cerrad los ojos y ved a Rocío con seis años que a primera hora el lunes va a clase de Educación física con el profesor David, a segunda hora tiene religión con la profe Conchita, a tercera se encuentra, !por fin!, con su tutora y da mates, a cuarta da naturales en inglés con Alejandro… -menos mal que llega el recreo- a quinta hora tiene lengua con su profe de nuevo y a última música con la señorita Inma… Rocío tiene seis años y por suerte para ella no padece ningún déficit. ¿Qué le estamos pididiendo a Rocio?
Y a todo esto puede llegar la inspección y pedir las programaciones de aula… o hacer un somero análisis de la situación del centro y poner objeciones y pegas… ¿ a qué? … no entiendo nada.
Seguimos, pero creo que vamos por muy mal camino, aunque algunos aún sigamos soñando.
Desde mi Azotea 
Soy profe de Infantil y observo desesperado cómo esta fragmentación de los tiempos escolares se está extendiendo también a esta etapa… Saludos.
perdimos Conocimiento del medio, luego llego science ( os imaginais la reproducción asexual de las plantas en ingles)…nos han traído el desastre
Todo esto es una barbadas, ante esta situación y con las manos atadas, como podemos intentar cambiarlo los maestros maestras ? Porque es urgente que esto cambie por el bien de los niños y niñas.
Reblogueó esto en Diario de medios y razones.
¡Qué pena de educación, cada vez peor, los niños necesitan de un@ tutor/a que les de seguridad y atención además de aprendizaje! Pobrecitos !! Van a hacer niños robots, sin alma y enfurecidos contra el mundo!!!
Estoy totalmente de acuerdo contigo. Se nota que sabes de lo que hablas. Estas al pie del cañon, como muchos de nosotros. Has sabido expresar con tus palabras el malestar que tenemos los maestros y maestras de primaria que se nos pide trabajar como tutores de un curso y no podemos hacerlo bien. Muchas gracias.
Lo has bordado!!! Me quito el sombrero… soy maestro de primaria y es justo la situación por la que estamos pasando… yo en el mejor de los casos este año tengo trabajo como maestro de apoyo ya que en la «ANDALUCÍA IMPARABLE» de la Sra. Díaz prima más el pseudobilingüismo del que se jacta en todos los medios siempre que puede… Para mí y otros muchos compañeros es vergonzoso!!!!
La ANDALUCÍA IMPARABLE ya no es de la nefasta Sra Diaz, ahora es del nefasto Moreno…distinto collar mismo perro
¿Que hacemos ante tal ‘decontrucción’? Las decisiones que afectan a nuestra futura generación y a sus actuales docentes están siendo tomadas por personas que ignoran completamente el latir y el respirar de las escuelas… ¿Habremos de seguir tragando directrices tan desconectadas de la realidad, tan alejadas de las necesidades de los niños y de la sociedad? Tal como están hoy las cosas solo veo dos opciones:
Seguir tragando con esta multitud de órdenes, decretos e instrucciones o legitimarnos en el camino que hemos elegido como docentes y desobeder esas decisiones, entrando, desde un punto de vista, en la ilegalidad.
Gracias! Desgraciadamente las vías de salida sólo recaen en nosotros mismos.
Los especialistas no eran tutores hasta que llegó el francés? Demagogia que desune al profesorado…muy bien!